26 abril 2007

Sin rastro


El rastro que sigo es ninguna huella
a este lado de la sombra ya no importa,
tu latido parado por la tormenta
mi espíritu me ha dejado por otra.

Disculpen la osadía de peligro no tocar
jugar cada momento es ofrenda delicada,
defensa y ofensa sin término medio
¡… si al menos dejases la mitad de tus besos!

Los besos duplicados que regalas por ahí
las cicatrices son promesas sin cumplir,
¿qué te vas a creer sin balbucear?
te he olvidado y no tiemblo cuando miras.

Pero si tan cerca hablas y respiras
creo que me inspiras aire de fuego
y quemarme quiero muriendo en el intento
vivir sin amar, ¡qué temible pesadilla!



Toledo 11 de septiembre de 2002, 9:00 AM Parque de la Vega

2 comentarios:

Judak dijo...

Espero que nuestra escapada proxima a Toledo sea tan buena como tu poesia, amigo.

Un abrazo

Anónimo dijo...

Genial este texto... aunque si es en Toledo es fácil inspirarse jeje ;) (lo dice una "acogida" por Toledo )

un besillo !

Tharsis
http://mientrasvivimos.blogomundo.com/

Tú mismo

Volverán a las calles otrora caminos, mañana quién sabe... el vértigo de estarse quietos, cuando el mundo que gira te ponga en aprietos...